Tendinopatia del tendon de Aquiles y ejercicio
El dolor en el tendon de Aquiles o la inflamacion puede venir precedido de una tendinopatia
La tendinopatía de Aquiles es una patología que genera dolor y discapacidad funcional a la persona que lo padece. El tendón es una estructura que se encuentra interpuesta entre el músculo y el hueso, encargado de transmitir la tensión generada por el movimiento del cuerpo. Está formado por:
- haces de colágeno, encargados de proporcionar fuerza tensil al tendón;
- células y
- sustancia fundamental,
cuyo objetivo es generar un soporte estructural a las fibras de colágeno y regular el ensamblado extracelular del procolágeno dentro del colágeno maduro.
El tendón de Aquiles está formado por la unión del músculo gastrocnemio con el músculo sóleo, insertándose en la tuberosidad postero-superior del hueso calcáneo. Es el tendón más fuerte del cuerpo, pero la elevada carga a la que se encuentra sometida y los esfuerzos continuos le convierten en uno de los principales focos de lesión.
La etiología del tendón de Aquiles está poco definida. La lesión tendinosa del tendón de Aquiles es el resultado de un proceso de degeneración que aparece cuando las actividades físicas son superiores a la capacidad que tiene el tendón de regenerarse. La carga excesiva frente a un esfuerzo enérgico es considerada una de las causas principales de lesión, siendo los atletas uno de los grupos más afectados debido a la alta intensidad y frecuencia del entrenamiento. Otro grupo de afectación importante se encuentra en los trabajadores que realizan gestos repetitivos en determinados ambientes laborales, como los médicos o bailarinas. Esta patología disminuye el número de días hábiles de los trabajadores, suponiendo un gasto importante en la sociedad.
Se ha observado que un programa de ejercicios excéntricos como tratamiento conservador es beneficioso para la recuperación de las lesiones tendinosas, siendo una opción terapéutica efectiva para el tratamiento de la tendinopatía de Aquiles. La combinación con otras terapias como estiramientos, ondas de choques o electroterapia podrían ser beneficiosas.
Actualmente la dosificación no está completamente establecida, pero diversos autores han propuesto diferentes programas de entrenamiento. El protocolo de Alfredson en los años noventa parece que tiene la evidencia más fuerte, aunque otros protocolos ofrecen resultados similares. Este consiste en la realización de ejercicios excéntricos durante doce semanas, todos los días se la semana, dos veces al día. Se realizarían un total de seis series de quince repeticiones cada una, de las cuales, tres series se realizarían en posición erguida con extensión de rodilla y las otras tres series en posición erguida con flexión de rodilla. Se realizaría incrementos de 5kg de peso al completar seis series sin dolor. Aun así, queda demostrado que el programa de ejercicios excéntricos tiene mayor efecto en los hombres en comparación con las mujeres.
En conclusión, podemos decir que:
Un programa de ejercicios excentricos podría ser beneficiosa para todo paciente que sufra de una tendinopatía del tendón de Aquiles, siendo mayor su eficacia en hombres en comparación con mujeres.
Un post muy interesante